En el día a día de nuestros hogares, las calderas desempeñan un papel clave al proporcionar calefacción y agua caliente. Sin embargo, la presión de la caldera a veces puedes causarnos algún tipo de contratiempo que provoca un desafío a nuestro confort. Una de las causas más comunes que nos llevan a estas situaciones es cuando la presión está baja, que puede surgir por diversas razones. Desde fugas en el sistema hasta problemas electrónicos, cada factor cuenta para mantener el funcionamiento óptimo del equipo.

Las calderas operan de manera óptima cuando mantienen una presión adecuada en su sistema. Esta presión, que tiene un rango recomendado generalmente entre 1.5 y 2 bares, es esencial para el rendimiento eficiente de la calefacción y la provisión de agua caliente en nuestros hogares.

Causas comunes de la baja presión de la caldera

1.      Fugas en el sistema

Las fugas en el sistema representan uno de las causas más frecuentes que provocan la pérdida de presión en las calderas. Detectar y corregir estas fugas a tiempo es esencial para mantener el rendimiento óptimo del sistema y evitar daños a largo plazo. La vigilancia regular del sistema es crucial para garantizar su integridad y prevenir pérdidas de presión.

2.      Problemas con la llave de vaciado o circuito de calefacción

Problemas relacionados con la llave de vaciado o el circuito de calefacción también son causas habituales. Por una parte, una llave de vaciado desgastada puede causar pérdidas inadvertidas de agua. Mientras que una fuga en el circuito requiere atención inmediata.

3.      Fallos en el sistema electrónico

Los fallos en el sistema electrónico pueden influir en la indicación de presión en la caldera. Un reinicio simple puede resolver algunos problemas. Pese a ello, es apropiado que, en casos como este, se cuente con la asesoría de un técnico experimentado para abordar la cuestión de manera efectiva. Mantener el sistema en condiciones óptimas garantiza una lectura precisa de la presión y un rendimiento eficiente.

4.      Radiadores sin purgar

El mantenimiento regular, como el purgado de radiadores, es recomendable para prevenir problemas de pérdida de presión. Aunque los radiadores modernos a menudo incorporan sistemas de purgado automático, en modelos más antiguos el purgado manual es necesario. Este proceso, realizado antes de cada invierno, asegura que el sistema esté libre de aire, evitando problemas relacionados con la presión.

5.      Problemas con la válvula de presión

La válvula de presión en la caldera juega un papel importante en el mantenimiento de la presión adecuada. Su mal funcionamiento puede ocasionar una pérdida gradual de presión. Y para garantizar un rendimiento eficiente y prevenir pérdidas de presión, es necesario un mantenimiento regular, incluyendo inspecciones y posibles ajustes de la válvula.

En resumen, resolver el problema de pérdida de presión en las calderas implica prestar atención a distintos aspectos. Detectar y arreglar fugas a tiempo, cuidar de la llave de vaciado y del sistema electrónico, y asegurarse de que la válvula de presión funcione correctamente son acciones clave. Por ello, en masaGas ofrecemos un servicio completo de asesoramiento personalizado en instalaciones energéticas, para que puedas disfrutar del mayor confort con tu caldera en casa.

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